Mejor no hablar...

Hoy, jueves 25 de septiembre de 2008, mejor no hablar de esas soluciones oportunistas que son la especialidad de nuestro país. Ahora afirman que habrá gendarmes en los trenes: anunciaron que habrá grupos de cinco efectivos patrullando vagones y andenes. Y más policías. Esto ocurre tras los últimos incidentes, que incluyeron trenes quemados. Los usuarios creen que el plan puede diluirse, como ocurrió otras veces. Y si no, recuerden las campañas para usar cinturón de seguridad, las bolsas verdes para separar la basura, y tantas otras medidas que duran lo que dura la noticia en la tapa de los diarios…

Mejor no hablar del otro D´Elía, el tío Luis. Indignado por los movimientos desafiantes de nuestro presidente en ejercicio, Julio Cobos, el dirigente social Luís D´Elía emitió un comunicado para atacar duramente al señor Cleto. Entre otras cosas, D´Elía dijo que Cobos "es un lamentable personaje de la política”, y lo calificó como “miserable y traidor”.

Mejor no hablar del susto y la contradicción que coparon el Norte…En un dramático discurso y acorralado por la falta de acuerdo en el Congreso para aprobar una ley que limpie las deudas "tóxicas" de los bancos, como las llamaron, el presidente George W. Bush advirtió anoche que "toda la economía norteamericana está en peligro". Y el señor de las guerras quiere que todos garpen las macanas de los privados más codiciosos de la historia del mundo… igual sigue siendo preferible rescatar deuda privada con fondos públicos que usar fondos públicos para aplastar países por ahí…

Mejor no hablar de esas blancas palomillas sin clases. Los maestros de Provincia siguen de paro hoy y mañana. La medida afecta a unos tres millones de chicos de escuelas públicas, y todos los docentes que no les aumentaron un sope. Los gremios rechazaron una nueva oferta del Gobierno bonaerense porque dicen que para subirles el básico a $ 1.450 les ofrecían blanquear una suma que ya venían cobrando. O sea, nada…

Mejor no hablar de la jurisprudencia. En Goiania, Brasil, condenaron a una mujer a pagarle una indemnización de 31.500 reales (unos 17.500 dólares) por daños morales a la esposa de su amante por nueve años. La decisión judicial favoreció a una profesora que alegó haber sufrido no solo por la infidelidad de su marido sino también por las humillaciones y las burlas de colegas, familiares y amigos. Mientras tanto, el tipo, como si nada, sigue con su mujer y sin desembolsar un peso…